La Cámara de Expendedores de La Pampa informó que, según datos declarados en el Ministerio de Energía y Minería de la Nación, en febrero las ventas de combustibles aumentaron un 19,6 por ciento con respecto a igual mes de 2015. La mejora incluye a todas las variedades a excepción del GNC cuya demanda se resintió un 3,7 por ciento en este período.
El crecimiento puede explicarse, según el Gerente de la entidad, Dr. Santiago Ferro Moreno, al efecto que aún tiene la exención del Impuesto a la Transferencia de los Combustibles, tanto para los pampeanos como para los de provincias aledañas, viajeros y transportistas.
“Estamos en los meses de vacaciones, donde la provincia funciona como eje de paso para varios turistas. También en época de cosecha y transporte de granos hacia los puertos. La logística de varios transportistas de seguro ha cambiado, principalmente los que vienen del oeste o norte del país”, sostuvo ante la consulta de surtidores.com.ar.
A nivel macro, apuntó: “debemos poner en la balanza que el aumento de los precios de los combustibles va por debajo de los incrementos de precios en los bienes y servicios en general, incluso de los posibles aumentos de salarios”.
En este contexto Ferro Moreno afirmó que los valores de las naftas y el gasoil no han acompañado este ritmo, cuestión que va disminuyendo cada vez el beneficio del empresario, más aún si se trata de una Pyme. “Los márgenes se van achicando en general, principalmente por el estancamiento real de los precios de los combustibles y el aumento considerable de los costos operativos y de estructura”, remarcó el empresario.
Asimismo, advirtió que a pesar de los indicadores favorables para este rubro, en general la actividad económica se está enfriando. “Por la sostenibilidad del negocio esperamos que la tendencia se mantenga, pues el aumento de los costos fijos es impresionante”, señaló Ferro Moreno. “Los servicios (por ejemplo la luz ha aumentado más del doble en las estaciones de servicio de la provincia), los salarios (en términos absolutos el aumento ha sido considerable en el último año) y los insumos en general y los específicos, el incremento de los costos ha sido sustancial”.
Finalmente, expresó su preocupación por la situación del GNC. “La disminución del consumo de GNC no es un buen dato para nosotros, pues el aumento de los costos de electricidad tiene un impacto muy importante en esta unidad de negocio. Si a esto le sumamos el aumento en general de los costos fijos, y que es posible una suba del insumo en el corto plazo, tendremos que afinar los lápices para sacar bien las cuentas”, alertó el directivo de CECLA.