A pesar de que son las mismas empresas que participan del mercado de combustibles, la venta de lubricantes en la Argentina no responde a idénticos patrones de inserción en el gusto del consumidor. En este segmento la diferencia entre las petroleras es mucho menor que en las naftas y el gasoil e incluso hay marcas que no participan de esa actividad muy bien posicionadas.

Según la Secretaría de Energía, la mayor participación de la canasta de aceites es propiedad exclusiva de YPF, que se apropió durante el primer bimestre del año del 40.1 por ciento del mercado con un volumen comercializado de 16.794 millones de litros. El segundo lugar le corresponde a Shell, con una intervención del 22.8 por ciento, un índice mayor que en los carburantes.

Si bien los lugares de privilegio responden a los mismos esquemas que operan sobre los combustibles, el tercer lugar del podio ofrece una sorpresa: la presencia de Total con el 10 por ciento de preferencia. Las razones de este posicionamiento se pueden encontrar en la alianza estratégica de recomendación con Peugeot y Citroen aunque la petrolera francesa desarrolló una amplia gama de productos de calidad que trascienden esa asociación. “Tiene que ver con todas las facetas de nuestra empresa: investigación, desarrollo, comercio y postventa”, señalan desde la compañía de origen francés.

Puestos más abajo se ubican Esso y Petrobrás, ambas con el 9.9 y el 7.3 por ciento, mientras que ELF le pisa los talones a ambas.

Como se menciona anteriormente la venta de lubricantes en nuestro país no goza del mismo status que las naftas: durante el año anterior el consumo observó una importante caída aunque este año comenzó a mostrar atisbos de recuperación. De acuerdo a datos oficiales, en el 2008 se comercializaron 316 millones de litros, un 14 por ciento más que el año siguiente.