Ángel Enrique Taddei, titular de Leveal, empresa dedicada a la comercialización de combustibles, observa que el mercado “está muy competitivo” como consecuencia de  que “las petroleras avanzaron en forma directa con grandes, medianos y  pequeños clientes, acotando el margen de los revendedores”.

Es un tema que observa con preocupación, ya que la concentración de los despachos se presenta como tendencia y la realidad es que para los distribuidores se torna complicado mejorar las condiciones de comercialización que ofrece el proveedor. Para conservar la clientela, reaccionan con mayor atención, financiación y optimizando la logística. Estar a tiempo de las necesidades es el secreto de supervivencia.

Mientras tanto, Taddei indica que en febrero de este año no hubo cambios sustanciales en la demanda, a diferencia de lo que ocurrió con la venta de nafta súper en las bocas de expendio que experimentó una baja luego de más de 10 años. Incluso destaca que “se nota crecimiento sostenido en el producto Euro Diésel con bajo contenido de azufre”.

Gracias a las buenas perspectivas que presenta la cosecha luego de la rebaja de las retenciones a las exportaciones en soja, maíz y otros cereales de peso, el empresario estima que  “el sector agrario será un gran impulsor del consumo de combustible, en especial de gasoil”.

Días atrás, la Bolsa de Comercio de Rosario estimó una cosecha de 58,5 millones de toneladas de soja y 24,2 millones de maíz. Pero la interrupción de los frentes de lluvia y las intensas olas de calor quebraron la posibilidad de superar la campaña récord del año pasado. Actualmente, un productor de la pampa húmeda necesita vender 36,5 por ciento menos de maíz y un 11 de soja para cubrir los costos necesarios para volver a sembrar estos cultivos.

No obstante, dada la incertidumbre de la economía, Taddei indica que “las expectativas son de gran cautela hasta cumplido el primer semestre”. En algunos rubros hay mayor movimiento, pero también hay sectores que están advirtiendo serios problemas financieros.