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La búsqueda de la excelencia no se logra sólo con una esmerada atención o un ambiente cálido y confortable. Hay que estar atentos a los nuevos desarrollos para que los clientes se sientan cómodos y elijan volver.
Las tiendas de conveniencia han logrado en nuestro país un desarrollo comparable a las de los principales países del mundo. Son espacios cómodos y agradables con amplias superficies vidriadas, ambientados de tal modo que favorece la relajación del cliente que las visita.
Todo se conjuga para lograr su satisfacción: la cafetería, la variedad de productos, el mobiliario, la higiene y fundamentalmente la atención de excelencia, que en conjunto logran un ambiente seductor que invita a disfrutarlo.
Sin embargo, la tecnología siempre ofrece una nueva vuelta de tuerca para satisfacer las necesidades de los clientes. La nueva tendencia es disponer de cargadores para que nadie se quede sin energía en sus dispositivos electrónicos.
La petrolera española Galp ha sido una de las pioneras en este tipo de iniciativas: ha instalado en sus tiendas los Supercharger de Coca-Cola, un sistema de carga rápida que tienen forma de botella de Coca-Cola, que incluye dos conectores universales, para Iphone y para smartphones.
A esta propuesta se suman otros servicios que ayudarán a mejorar el bienestar de los miles de visitantes que concurren a diario, como es la conexión wi-fi, hoy indispensable en este tipo de comercios o enchufes para mantener activas las laptops. En España conviven 7647 minimercados que facturan anualmente 1100 millones de euros anuales
El negocio en la Argentina
Por tamaño de la red, el negocio es liderado por YPF, que cuenta con más de 400 puntos de venta. Los minimercados de la petrolera estatal operan con la marca Full, que llegó hace más de diez años para reemplazar a AM/PM. Esta última es una cadena norteamericana cuya licencia para operar en la Argentina había sido traída por el grupo Repsol cuando era el dueño de la petrolera y que jugó un papel clave en el desarrollo del negocio al incorporar en el mercado un formato nuevo como el de las tiendas de conveniencia, según expresa un relevamiento efectuado por “La Nación”.
“Gran parte de la expansión del negocio se explica porque con el crecimiento del mercado automotriz multiplicó el número de clientes potenciales de estos minimercados. No hay que perder de vista que en 2003 había un auto cada diez hogares en la ciudad y hoy la relación es un auto cada cinco“, señaló al medio Damián Di Pace, director de la consultora Focus Market.
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