La polémica por la intención de algunos intendentes, especialmente en la Provincia de Buenos Aires, por conseguir recursos extras a costa de los expendedores de combustibles y el automovilista, se reavivó en el Municipio de Tres de Febrero, pero está siendo monitoreado por concejales y dirigentes políticos, como también dueños de Estaciones de Servicio en diferentes zonas del Conurbano.

En este caso, luego de que el Jefe comunal de dicha jurisdicción, Diego Valenzuela, ordenara a los ediles oficialistas implantar el gravamen que eleva el precio al público del litro de nafta  y gasoil en 40 centavos, como así también, al metro cúbico de GNC en 20, los políticos de la oposición en conjunto con expendedores y cámaras de comercio locales, actuaron rápidamente contra  lo que consideran “un nuevo golpe a la rentabilidad de las Estaciones de Servicio y un atentado contra el bolsillo del vecino”.

Es por ello, que el Dr. Alejandro Federico Collia, Concejal del PJ- FPV,  puso a consideración de los representantes vecinales de la zona de Caseros, un proyecto de ordenanza preparatoria derogando la  Tasa Vial de la norma  fiscal e impositiva de 2017.

En sus afirmaciones, el ex Ministro de Salud Bonaerense, dijo a surtidores que “la iniciativa tuvo su origen luego de que los responsables de las Estaciones de Servicio se acercaron a nuestro Bloque para manifestar su preocupación ante la imposibilidad económica de hacer frente al pago de la referida Tasa Vial, cuya aplicación consideraban de dudosa legalidad”.

Alertó además que “si bien los municipios se encuentran facultados por la Constitución  de la Provincia y la Ley Orgánica de las Municipalidades para crear y exigir el pago de una tasa, igualmente se deben respetar  los principios de la tributación y de armonización con el régimen impositivo provincial y federal, de manera que la exacción sea resultado de un estricto ajuste al ordenamiento jurídico.”

Aseguró que el proyecto contra el tributo puede ser tomado por otros municipios, ya que está basado en las leyes nacionales y provinciales. En ese sentido alertó Collia que  el Decreto que creara la Dirección nacional de Vialidad en 1958, al cual adhirió Buenos Aires en su momento, compromete a las provincias como a los municipios  a no establecer gravámenes locales sobre los combustibles y los lubricantes con impuesto alguno, con lo cual, tratándose de una tasa que los grava “resulta palmario su carácter inconstitucional”.

En ese mismo orden de cosas, coincidió con la jurisprudencia existente sobre este conflicto, ya que no cumple con una concreta, efectiva e individualizada prestación de un servicio relativo al cliente, a la vez que recordó que en el año 2015, el Tribunal de Cuentas de la Provincia de Buenos Aires oportunamente había dictaminado que la Tasa Vial es inaplicable por los municipios.

Finalmente vale destacar que recientemente la ordenanza que se opone al gravamen fue presentada ante el Concejo Deliberante de Tres de Febrero, acompañada y avalada por cientos de firmas tanto de vecinos, como de líderes gremiales y políticos de la zona y por  cada uno de los estacioneros que se vieron afectados por esta decisión.