“Gracias a la buena voluntad de todos los que estábamos en la mesa de negociación, finalmente pudimos destrabar el conflicto y nos pusimos de acuerdo para que por el lapso de 60 días, no haya medidas de fuerza del Sindicato y por la parte empresaria ningún despido a causa de la caída en las ventas”, resumió con estas palabras a surtidores.com.ar, el Presidente de la Federación Argentina de Expendedores de Nafta del Interior (FAENI), Alberto Boz.

Al respecto aseguró que dentro del acta también figura el compromiso del Estado provincial para estudiar y resolver el problema de la falta de rentabilidad que aqueja a las estaciones de servicio santafesinas, cuyas autoridades estaban representadas por  los Ministerios de Trabajo, de Medio Ambiente, de Producción y de Economía.

De acuerdo a lo explicado por el dirigente, “los dos puntos principales en los cuales se basa el compromiso de las autoridades pasan en primer lugar por estudiar las causas del escaso margen de ganancias que por litro vendido le quedan al expendedor y en segundo término, pero no menos importante, se analizará la manera de reformular el sistema de cargas impositivas que gravan tanto al producto como a los establecimientos, cuyo peso cada vez es mayor en contra de los empresarios pymes”.

Con las autoridades ambientales específicamente, Boz informó que se habló de la necesidad de reforzar e igualar los controles de descarga de combustibles y que se cumplan con las normativas vigentes que deben ser aplicadas “a todos por igual”.

Este reclamo de los estacioneros, surgió por el hecho de que el auge de las ventas mayoristas sin control del gasoil por parte de las compañías petroleras, genera peligro para la población y para el medio ambiente, tal cual lo denunciado por FAENI.

Por ello, también las compañías serán convocadas por la cartera laboral de Santa Fe para que se sienten a la mesa de diálogo con todas las partes implicadas en la comercialización de combustibles y brinden las explicaciones necesarias, como así también se abran a la búsqueda de consensos para “darle una solución a los perjuicios que generaron en nuestros negocios la venta mayorista a precio más barato y sin control del gasoil y la nafta”, alertó el estacionero.

Destacó que los funcionarios de gobierno se comprometieron no solamente a analizar las causas sino que firmaron el acuerdo para empezar a trabajar en el arreglo de los problemas tanto de rentabilidad, como de los despidos, la venta mayorista y la presión tributaria a partir de enero, “porque de otra manera, el plazo acordado no sirve y las soluciones no se harán concretas”, sentenció Boz.