En la primera quincena los consumidores prefieren utilizar la tarjeta de débito, dado que todavía disponen de dinero en sus cuentas. Ya pasando el día 15 del mes, en cambio, los playeros empiezan a recibir con mayor frecuencia las de crédito. Es lógico, la reducción del saldo del automovilista se efectúa prácticamente un mes después y en tiempos de crisis conviene.

Por lo que observa en el mercado, Walter Costa, directivo de la Federación Argentina de Expendedores de Nafta del Interior (FAENI) calcula que en líneas generales aproximadamente un 50 por ciento de las ventas se efectúan con plásticos.

En cada despacho los bancos cobran el 1.5 por ciento en concepto de comisión, lo que representa un 20 por ciento del margen de la estación de servicio, puntualmente en las que trabajan bajo el sistema comercial de consignación. “Impacta fuertemente”, lamenta el empresario. Se nota sobre todo los días domingo, cuando se ofrecen descuentos y promociones.

A mediados del año pasado, VISA firmó un convenio con YPF para acreditar a los operadores el pago por la compra de naftas y gasoil en 48 horas, que según confirma Costa sigue vigente y permite que se ofrezca el servicio sin tanta resistencia.

En su momento, la Confederación de Expendedores (CECHA) también llevó adelante reuniones con VISA para evaluar alguna disminución del cargo financiero, aunque sin demasiada suerte. Ayer, la Cámara Argentina de Comercio (CAC) y la Federación Gremial del Comercio e Industria reclamaron lo mismo ante el Ministro de Producción, Francisco Cabrera.

En la opinión de Costa las petroleras tendrían que realizar sus aportes sobre este gasto operativo, al igual que el Estado Nacional, considerando que es una ventaja al usuario que se impone de manera obligatoria por disposición de la Administración Nacional de Ingresos Públicos (AFIP).