Crece la actividad
En Santiago del Estero, el incremento interanual respecto del año pasado de la colocación de nuevos equipos, rondó un 40 por ciento y en algunos talleres llegó al 100. Los expendedores aseguran que también mejora la demanda
Conforme a los cálculos oficiales de la CEPASE, la industria del Gas Natural Comprimido para automotor goza de buena salud y la brecha de precios al consumidor se mantiene como tradicionalmente había sido antes de los cambios de 2016.
“Gracias a la diferencia de precios con los últimos aumentos de los combustibles líquidos, un estudio en el cual medimos el último trimestre de este año, respecto al mismo período del año pasado, nos arroja una recuperación del 6 por ciento de ventas de GNC en nuestras Estaciones de Servicio”, tal cual las palabras compartidas a surtidores.com.ar, por Pedro LLorvandi, Presidente de la Cámara de Estacioneros de la provincia.
De acuerdo a lo expresado por el dirigente del sector, “la tendencia seguirá acrecentándose a causa de tres factores principales, los cuales están relacionados a la brecha de precios que retomó su curso habitual, las políticas del Ministro de Energía Ingeniero Juan José Aranguren que permitió volver al sistema desdoblado de facturación y brindó previsibilidad a los precios en boca de pozo, como así también, en tercer lugar, la opción de economizar por parte del grueso de los usuarios de este combustible, quienes utilizan el vehículo como herramienta de trabajo”.
El expendedor informó que el costo final del metro cúbico de GNC ronda los 11, 40 pesos en Santiago del Estero, a diferencia del litro de nafta súper que trepó a 24, 5 pesos. Por ello, transmitió el dato que llega a la Federación desde los talleristas, que alientan volver a los niveles de actividad que durante 30 años tuvo la Argentina en una industria que actualmente brinda trabajo a más de 50 mil familias.
El dirigente adelantó que se espera una leve actualización de 50 centavos por m3, que puede efectivizarse en cualquier momento de aquí a fin de este año, pero que no influirá en nada con el alza de las conversiones y las ventas.
“El consumidor argentino está muy acostumbrado al uso de GNC y a medida que retomó la confianza en la economía y vio que era rentable, económico y limpio para el medio ambiente como siempre lo fue, empezó a decidirse nuevamente por este producto”, dijo Llorvandi.
A diferencia de los años anteriores al 2015, donde un equipo de 5ta generación se amortizaba con el uso en 8 meses, la crisis hizo en 2016 que esa misma situación se lograra en 18 meses, pero actualmente, se estabilizó la inversión que se recupera en un plazo de un año.
Explicó el estacionero que la ventaja que brinda el equipo de GNC, más allá del combustible barato, pasa por el hecho de invertir en un bien que no pierde su valor como si le pasa al automóvil, con el cual, el dueño de los tubos puede utilizarlo en su nuevo vehículo o vender el usado con el valor agregado del GNC.
Acivar/desactivar voz
Leer página