Representadas por el Presidente Juan Carlos Basílico, el Tesorero Julio César Alonso y el Secretario Honorio Herrera, explicaron las complicaciones que este tributo causa al sector expendedor a los directivos del Ente recaudador bonaerense, entre los que estaban su Jefe de Gabinete Juan Luis Catuogno y el responsable del Área de Recaudación y Catastro, el Contador Walter D´Angela.

“Esta situación no solo implica obtener mayor capital de trabajo, con el costo financiero que ello involucra, sino también -en muchas oportunidades- la imposibilidad de que el empresario pueda hacer retiros a cuenta del resultado de su explotación”, explicó a surtidores.com.ar, Basílico.

Por su parte, el asesor contable Sebastián Vázquez, señaló que sobre la comercialización minorista de combustible recaen, a la vez, varios regímenes de recaudación establecidos por la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires, como el régimen de percepción sobre las compras de combustibles líquidos, el régimen de retención sobre las liquidaciones de tarjetas de débito y crédito, y el régimen de percepción sobre acreditaciones bancarias.

“La conjunción de los tres sistemas citados, sumado al creciente número de operaciones concretadas a través de tarjetas de crédito o débito -que implican, además, la acreditación de dichas sumas en las cuentas bancarias del expendedor- hace que mes a mes se generen saldos a favor del contribuyente o, como ya se ha dicho, se inmovilice capital de trabajo”, denunció Vázquez.

Basílico a su vez, detalló que la  Federación ha planteado a las autoridades de ARBA esta situación, acompañando los pertinentes estudios de precios y rentabilidad, pero “aún no se han obtenido respuestas en cuanto a la modificación de la normativa, con alcance para las estaciones de servicio”.

Por ello, la entidad comunicó a los colegas y asociados que hagan una revisión de su situación, “porque puede ser posible que la aplicación de alícuotas altas de retención y percepción se relaciona con el riesgo fiscal del contribuyente”, dijeron.

Explicitaron que las cuestiones que pueden incrementar la alícuota pasan desde una Incorrecta codificación de la actividad de acuerdo al NAIIB; la Presentación tardía de declaraciones juradas mensuales, en forma recurrente; el Incumplimiento de los deberes como agente de recaudación; el acogimiento a planes de facilidades de pago y tener deuda de impuestos bonaerenses en instancia judicial.

“También debe tenerse en cuenta que existen mecanismos previstos normativamente que posibilitan, por un lapso acotado, la adecuación de las alícuotas de retención y/o percepción”, advirtió el especialista de la FEC y consideró que muchas veces, los inconvenientes surgen porque los contribuyentes no utilizan estas herramientas.

Por otra parte, comentó el contador que “ante la acumulación de saldos a favor, se impone el inicio de una demanda de repetición ante ARBA, teniendo en cuenta que recién se devengan intereses a favor del contribuyente a partir del momento de su interposición. Si bien resulta un trámite que en la práctica lleva mucho tiempo, también es cierto que existen herramientas legales que posibilitan reducir el lapso”.

Basílico finalizó diciendo que “existe claramente una superposición de regímenes de recaudación que establece la Provincia de Buenos Aires y esto provoca que le retengan a las Estaciones de Servicio más de lo que tienen que pagar”, al tiempo que se mostró esperanzado en llegar a buen puerto porque a su entender, “la reunión fue más que positiva y las autoridades competentes realizaron una fuerte promesa de solucionar este tema para todo el sector”.