Desde fines del año anterior, en la Ciudad de Buenos Aires comenzó a ser obligatorio contar con cambiadores de bebés en los baños de hombres para determinados comercios y oficinas públicas, entre ellos los de las Estaciones de Servicio.

Su impulsor, el legislador Hernán Rossi explicó que “la finalidad de incorporar el equipamiento de los baños públicos de nuestra Ciudad, es una solución práctica para padres y madres porque el cambio de pañales no es una tarea exclusivamente femenina”.

La medida generó aceptación y comenzó a expandirse a otras localidades. En Mendoza, Viviana Gelaín (JSB), propuso imitar el proyecto porteño en los sanitarios públicos de ambos sexos o en su defecto, destinar un área especial para tal fin.

Según explica, el objetivo es reivindicar el rol del padre, proteger al niño o niña como sujeto de derechos para que pueda disponer de un cambiador para su uso, independientemente de a cargo de quien se encuentre. Asimismo pretende conservar la salud del bebé, sus padres y la población en general, ya que la falta de estos espacios genera la utilización de lugares no dispuestos a tal fin y luego transitados por diversidad de personas.

La ciudad de Santa Fe ha sido una de las primeras en contemplar la instalación de cambiadores de pañales para bebés en baños de hombres de Estaciones de Servicio o en espacios mixtos donde pueden entrar tanto hombres como mujeres. Más tarde le siguieron Río Grande, Ushuaia  y Córdoba, que ya había promovido instalar estos accesorios a mediados de 2016.

“Los tiempos han cambiado y la rutina moderna hace que el cuidado de los niños no sea algo privativo de las mujeres. Son cada vez más las familias que por un motivo u otro se ven en la necesidad de que el hombre sea quien tiene a su cargo el cuidado de los hijos, o bien que ello sea realizado de manera compartida. El problema es que la infraestructura no se ha adaptado aún a las necesidades de ambos padres”, explica las consideraciones del proyecto que también impulsa su disposición en los comercios de estas características ubicados en la provincia de Buenos Aires.

“Por dicho motivo, entendemos que una ley provincial que imponga la instalación de dicha infraestructura al alcance de ambos sexos resulta de gran necesidad”, reclama la propuesta.