El ex diputado y representante de los consumidores, Héctor Polino alertó que “si bien aún no se nota el impacto del 8 por ciento de incremento de los precios en el surtidor, seguramente en poco tiempo, la economía familiar se verá afectada por el traslado de los costos a los consumos básicos”.

Además Polino aseguró que la situación se agravará cuando se implementen los tres aumentos que están previstos para el resto de este año y el golpe al bolsillo será de similares características al del 2016, cuando se incrementó el valor de los combustibles en 31 por ciento.

En ese sentido, reiteró que es absolutamente injustificada una escalada de aumentos y va a provocar nuevos impactos inflacionarios en los precios de los artículos de la canasta básica  de alimentos.

Afirmó  que “cuando en el mundo baja el valor de los combustibles, en Argentina programamos  cuatro aumentos para lo que queda del año y como el 90 por ciento del transporte de cargas se realiza a través del camión, toda suba incide en la estructura de costos de los artículos de la canasta básica en un 35 por ciento”.

También, el dirigente socialista se mostró indignado por el hecho de que la empresa estatal YPF que concentra el 60 por ciento del mercado, en lugar de regular y contener el precio de los combustibles acompaña a las empresas privadas con un nuevo incremento.

PRECIOS TRANSPARENTES EN LAS ESTACIONES DE SERVICIO

Por otro lado, al referirse a la Resolución 51 de la Secretaría de Comercio para que el consumidor tenga información detallada de los precios tanto al contado como con pago de tarjeta de crédito, especificó que “no incidirá en el sector estacionero debido a que no es muy común pagar el combustible en cuotas con tarjeta de crédito a plazo”.

Sin embargo consideró que la medida es positiva para el comercio en general, aunque dependerá del comportamiento del empresariado, de la voluntad política del gobierno de hacer cumplir las normas y de la actitud de los consumidores de hacerse respetar.

Finalmente Polino expresó que “es fundamental que todos los comercios, incluso las bocas de expendio de combustibles cumplan con la ley de tarjetas de crédito que exige que el  pago con plástico en una sola cuota sea igual al pago contado efectivo”, algo que a su entender no siempre se cumple.